¡Queridas y queridos creadores de la Historia! En el marco de nuestras fiestas patrias del 15-16 de septiembre, les tenemos una receta muy mexicana, pero antigua que pueden hacer para estos festejos o en su vida diaria.
Esta receta es de la época de Benito Juárez, Maximiliano y Carlota, ahora sí que en pleno Segundo Imperio se publicó esta receta y curiosamente el primero en festejar el 15 de septiembre, dando “El Grito” en Dolores Hidalgo, Guanajuato, cuna de nuestra Independencia, fue precisamente Maximiliano.
RECETA 1865
Ingredientes para 2-3 personas
4 calabazas alargadas o redondas
2 zanahorias grandes
1 huevo crudo que se pondrá en la olla
½ kg o 1 kg de jitomate para hacer caldillo y para el relleno
1 cebolla mediana
2 o 3 dientes de ajo
1 manojo chico de perejil
1 o 2 huevos cocidos
Aceite 3 cucharadas soperas o al gusto
Sal al gusto
Pimienta al gusto
1 cucharadita de sazonador al gusto
50-100 gr de queso añejo o fresco o Cotija rallado.
Procedimiento
Lava y desinfecta las verduras.
Pon en la vaporera o a cocer las zanahorias y las calabazas por 10-15 minutos. Las calabazas deberán estar firmes.
Pica cebolla finamente(la mitad si es mediana o grande) y ponla en la olla previamente calentada y con aceite. Sofría hasta que quede transparente o se acitrone. Después pica 3 o 4 jitomates medianos con todo y cáscara, en cubos chicos y échalos a la cebolla para que se fría. Después vierte el perejil picado muy finamente. Todo a fuego medio a ligeramente bajo.
Parte las zanahorias en cuadritos y échalos a la olla con la cebolla, el perejil y el jitomate rojo para que se frían, puedes echar un poco de sazonador, sal y pimienta (no demasiada) ya que puedes echarle después de ponerle el huevo.
Después de que estén fritas y cocidas las verduras, echa un huevo, y revuelves constantemente para que no se pegue. Es como si hicieras huevos revueltos, pero al final va a quedar muy fino el huevo de tanto revolver. Después le pones el queso rallado. Revisa el sazón o condimento y agrega o no, sal y pimienta. Ya que esté listo este relleno lo puedes dejar en la olla o pasarlo a un platón.
A las calabazas alargadas ya cocidas y firmes, quítale los extremos, después las partes a la mitad, a lo largo. Si usaste las redondas, le vas a quitar o cortar sólo la parte superior, y va a quedar como “sombrerito”. En ambos casos de calabazas, quítales un poco de la pulpa o carn
e y la incorporas al relleno de la olla con la zanahoria y lo demás.Para hacer el caldillo de jitomate, en la licuadora vas a poner ½ kg de jitomate, media taza de agua, 2 o 3 dientes de ajo, la otra mitad de la cebolla que quedó. Lo licúas, lo cuelas y lo echas a la olla vacía en donde cocinaste el relleno, para que absorba los sabores o puedes usar otra olla limpia. Lo pones a fuego medio, revuelves un poco y lo dejas hervir.
Es el momento de emplatar y rellenar las calabazas con el guisado que hiciste, encima le echas el caldillo de jitomate y decoras con huevo cocido picado al gusto, también puedes poner más queso rallado y ¡listo, están súper ricas!