La Iglesia de Nuestra Señora del Pilar, mejor conocida como “La Enseñanza”
Por P. Parra F.
Cuando uno camina por la calle de Donceles, atrás del Pasaje Catedral, hacia San Ildefonso, nos encontramos con dos inmuebles barrocos, el Museo de la Caricatura, antiguo Colegio de Cristo y a los pocos metros, pero en la otra banqueta, una iglesia, que si uno no la conoce, pensaría que es una más.
Este magnífico templo es sin lugar a dudas, uno de los más hermosos que tenemos en el DF, en nuestro Centro Histórico. Aunque su nombre es Iglesia de Nuestra Señora del Pilar, popularmente es conocido como “La Enseñanza”, ya que fue parte del colegio para niñas (1754) y posteriormente, convento de la Enseñanza la antigua, de las monjas de la Compañía de María, en el siglo XVIII. Este colegio era gratuito y se mantenía de venta de productos que se hacían al interior del convento y de donativos. Las hermanas de la Compañía de María se dedicaban principal y casi exclusivamente, a la educación de las niñas novohispanas que iban a su colegio. La mujer que hizo todo lo necesario para que se fundara esa institución fue María Ignacia de Azlor y Echeverz, heredera de una gran fortuna.
El lugar del colegio y convento ha tenido diversos usos, hasta que en el siglo XX se convirtió en la sede de El Colegio Nacional, una institución de gran prestigio en donde se han incorporado los grandes creadores e intelectuales de México, como Diego Rivera, José Emilio Pacheco, etc.
La iglesia, a pesar de haber “vivido” algunas de las Leyes de Reforma (s. XIX) más drásticas, se pudo conservar práticamente de manera íntegra. Se construyó entre 1772 y 1778, aunque no hay documentos que comprueben que su arquitecto fue el gran Francisco Antonio Guerrero y Torres, se piensa que fue él, pues posee un estilo como el suyo.
La Enseñanza ha guardado magníficas obras de arte y retablos dorados de gran factura. Su belleza no sólo está en el interior, si no también, en el exterior. En la portada, sobre la puerta de madera de la entrada se halla una escultura de San José —patrón de la ciudad—, más arriba, en el óculo enrejado o ventana, está la Virgen del Pilar —patrona de la iglesia — y en lo alto está un remate que representa a la Santísima Trinidad. La portada tiene dos cuerpos o divisiones horizontales. Las esculturas del primer cuerpo son de San Miguel Arcángel y San J. Nepomuceno, en tanto que las del segundo son de San Benito de Nursia y San Ignacio de Loyola.
El interior es magnífico, el retablo principal y los seis laterales poseen un barroco churrigueresco con pilastras estípites, así como un casi “bordado” en la madera. Las puertitas de madera con arcos de medio punto que están en el retablo central servían como confesionarios y en el lado derecho del altar se encuentra la cratícula o ventanilla por donde las monjas recibían la comunión. Asimismo, también en el presbiterio o área del retablo principal, hay dos grandes lienzos: uno dedicado a la Virgen de la Asunción o la Asunción de María y otro a la Inmaculada Concepción, en tanto que en lo alto, la bóveda representa a la patrona de la iglesia, la Virgen del Pilar. Cuando caminen cerca de la Catedral Metropolitana o del Museo de San Ildefonso, no dejen de visitar este sitio, una de las iglesias más hermosas del DF.
Foto de Ana Laura Cuevas M.
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